Organizar un torneo o cualquier otro evento deportivo dentro de un club de ajedrez como lo es Mikel Gurea es mucho más que montar unas mesas con tableros y piezas encima. Promover este Open sub2200 y el Torneo Blitz MG es algo más que un acto que da vida al club, lo convierte en un punto de encuentro para el conjunto de los ajedrecistas. Esta competición es en definitiva un espacio donde las personas se reúnen además de para competir, para compartir su pasión, que es el ajedrez
Cuando un club como el nuestro logra que a sus eventos acuda tanta gente, generándose en ellos que se viva el deporte de forma vibrante, los resultados van más allá de las victorias o las derrotas. Deja de ser relevante la cantidad para hablarse de la calidad, en este caso humana, de quienes participan: jugadores, familias que los acompañan, amigos que animan y curiosos que se acercan a convertir lo que para ellos es un juego en verdadero espectáculo. Esa mezcla crea un ambiente especial, en el que cada partida es importante, pero la convivencia lo es aún más.
En esos encuentros el ajedrez se convierte en un puente. Personas de edades, niveles y procedencias tan diversas se encuentran alrededor de un tablero, compartiendo la misma pasión. Y aparece la camaradería: un apretón de manos antes y después de cada partida, una sonrisa tras una combinación brillante, un consejo entre veteranos y jóvenes. Es en esos gestos donde el club se fortalece, donde la actividad trasciende lo deportivo y se convierte en comunidad.
Un torneo bien organizado no sólo proyecta la imagen del club hacia fuera, atrayendo nuevos socios y simpatizantes, sino que también refuerza el sentido de pertenencia. Los jugadores sienten que forman parte de algo vivo, en constante movimiento. Y ese buen ambiente que se respira no surge por casualidad: nace del esfuerzo compartido, del respeto, del entusiasmo y del compromiso de quienes creen en el ajedrez como vehículo de unión.
A lo largo de estos años nos hemos topado con algunos ajedrecistas foráneos que bien podían haber militado en nuestras filas, porque con ellos ha existido una sintonía muy especial. Es a ellos este pequeño homenaje como ejemplo de lo que queríamos conseguir con este nuestro torneo, que es ya también suyo.
2021
Emilio Caballero (Cambrils): Fue el primer jugador que se inscribió en el torneo, incluso antes que los propios socios del club. Eso dio bastante de qué hablar en el club y a su llegada a Burlada fue recibido con los brazos abiertos, encontrándonos en frente a un jugador verdaderamente de club, ilusionado con el ambiente de la prueba, con la formación de los más pequeños y el trabajo en equipo. Emilio es un tipo cercano y amable con el ajedrez corriendo por sus venas. La paternidad le ha impedido volver a Burlada, pero todos los años nos escribe y nos tiene en mente, no perdiéndose el vínculo que se creó en esa primera edición.
2022
Jorge Rentería (Madrid): Que un jugador con una titulación de Maestro Fide acuda a tu torneo es algo que otorga al evento una etiqueta de calidad añadida. Y si además lo gana con una sonrisa y una simpatía contagiosa, uno no puede sino hacer lo posible por mantener la relación entre el evento y este jugador profesional. Jorge vive el ajedrez como lo hacen quienes saben de sus bondades, pero también de sus dificultades. Respetuoso en la victoria y elegante en la derrota, quienes han tenido la suerte y oportunidad de medirse a él han obtenido alguna enseñanza tras la partida, algo que cada vez es menos común. Y ya van varios años volviendo a Burlada…
2023
Cristian Schmid (Mendoza): Si en medio de un viaje de trabajo transoceánico haces lo posible por guardar un fin de semana para disputar un torneo de ajedrez y ese evento es el tuyo, el que lo hace vive el deporte como nadie, lo lleva muy adentro. Cristian es argentino y con su particular forma de hablar, melosa a la par de segura y confiada, no necesitó mucho para ganarnos y hacernos suyos. Además, intercambiamos vino de Mendoza y Navarra y nos regaló un surtido de alfajores que duraron un suspiro. Son unos pastelitos de dulce de leche con muchos sabores y variedades que deberían conquistar el mundo. Ojalá mantenga en Argentina el mismo recuerdo que tenemos aquí de él.
2024
Enoc Altabás (Benicarló): La vida es un pañuelo. Y es que Enoc ya era conocido para Mikel Gurea antes de que se le ocurriera venir a Pamplona, puesto que es una persona muy implicada con la promoción y el desarrollo del ajedrez en su propia localidad. Por Benicarló han pasado algunos jugadores nuestros y el año pasado fue él el que cumplió con la visita de vuelta. En Mikel Gurea nos une con él esas ganas de hacer las cosas de una perspectiva lúdica y también popular, sin dejar en ningún momento de lado a quienes tomarán nuestro relevo en breve, los jóvenes. Y este año Enoc repite… Bienvenido de nuevo.
2025
¿Serás tú el rostro de este nuevo torneo de 2025? En Mikel Gurea y la localidad de Burlada os recibiremos a los más de 120 ajedrecistas que acudís a la cita con los brazos abiertos. Seguro que disfrutas de la experiencia… y si no lo es el año que viene, lo será el próximo. Estamos seguros de ello.