El torneo Villa de Cintruénigo regresa como cada año justo un día antes de que en Burlada organicemos el nuestro en fiestas. Esta es ya la decimoquinta edición del campeonato, que tiene entre sus características que es nocturno. O acudes recién cenado o lo haces durante la prueba, porque ya para la séptima ronda tu estómago ruge como un león.
Pero la cosa no es para tanto, que la organización deleitó a todos los participantes con un picoteo y unas bebidas para paliar la sed y el hambre que provoca este nuestro deporte. Se agradecen estos detalles. En total 7 rondas a ritmo blitz de 5′, el de toda la vida.
De los 68 participantes, cuatro de los nuestros se animaron a tomar parte en el campeonato. El mejor de todos fue Jon Merino, que cuajó una notable actuación al finalizar en el puesto 16 (partiendo del 32) para alzarse con el premio como mejor jugador sub10 del torneo. Además, buena muestra del alto nivel que viene demostrando es su última victoria ante todo un +2045 Elo.
Un poco más abajo, en los puestos 45 y 53 los hermanos Daniel Pérez y Mario Perez firmaron una puntuación de 3/7 y 2/7 respectivamente. El torneo de Daniel fue un tanto irregular, ya que venció a los jugadores sin rating y no pudo conseguirlo ante los elados, mientras que Mario, pese a quedar un poco más abajo en la tabla, obtuvo algún resultado de calidad, al conseguir por ejemplo entablar ante un +1545. La nota más destacable del torneo fue que se sumó a la expedición Aitor Pérez, que volvía a los tableros para casi estrenar su Elo Fide. Finalizó en el puesto 28, mejorando casi veinte casillas su ranking inicial para sumar 4/7. Además, la victoria ante un +1600 en la última partida seguro que le anima a seguir participando.
La victoria en el torneo fue para MF David Lana con unos incontestables 6,5/7. Puedes encontrar más información en este enlace y leer la crónica del Club de Ajedrez Alfaro en este link.