Después del fulgurante inicio ante dos de los equipos más duros del torneo, la Bombonera recibía la visita de un equipo de nuestra liga, un conjunto con Elos no muy altos y que trabaja y cuida con esmero la cantera: el Martintxo B. La temporada pasada nos tocó visitar la llanada alavesa y el saldo fue muy positivo para los nuestros, con una abultada victoria por 0,5-3,5. Está circunstancia, unido al hecho de vernos líderes del torneo tras dos rondas, nos hacía prever que podíamos obtener un resultado satisfactorio.
Nuestros oponentes pusieron en los tableros al equipo más fuerte hasta el momento, una alineación muy equilibrada que rondaba entre los 1877 de la mesa 1 hasta los 1751 de la 4 (Elos muy similares a los nuestros). Por nuestra realizamos una rotación, dado que hay que dar minutos a todos los que quieran participar en el equipo. Pese a ello, el plantel de los naranjas resultó vistoso y confiable de cara a la consecución de un buen resultado. Adrián Vázquez y José Manuel Sánchez son dos habituales en las primeras mesas en el torneo navarro y trataron de defenderlas para bajar de tableros a los chavales, Mateo Echegoyen y Jon Goñi, que en breve darán el salto a las mesas nobles.
Adrián Vázquez anduvo apretado desde el inicio ante el buen nivel desplegado por Yaroslav Khoroshykh. El vitoriano fue mejorando su posición poco a poco, quedándose Adrián un poco atrás. Sin embargo, en el momento en el que nuestro mesa 1 pareció estar mejor y podía empezar a soltarse, un fuerte ataque con dos endiablados caballos sobre el enroque de nuestro capitán hizo que todo se viniera abajo. Una lástima.
La mesa 2 fue para José Manuel Sánchez. La suya fue la última en terminar y tal vez por eso fue la que los aficionados utilizamos como nexo para tomar unas cañas y analizarla en profundidad. No sabemos si su rival, Rubén Pomares, profundizó en todos los sibilinos entresijos que escondía la partida, pero lo cierto es que se llevó el punto. No entró en los temas que planteó José Manuel y ello le llevó a consumir más tiempo de lo deseado buscando abrir una posición que finalmente se vino en contra. Estuvo cerca de conseguir unas milagrosas tablas por continuo gracias a que su rival llegó a apurarse de tiempo en la refriega… pero no.
La tercera mesa nos brindó un encuentro de primer nivel nacional con dos de los mejores jugadores de 2011 del panorama actual; Mateo Echegoyen ante Jon Bocos. La partida la mantuvo controlada en todo momento nuestro canterano, si bien Jon pudo capturar un peón indefenso que dejó Mateo incrustado en el interior de las defensas de su rival. Pasadas dos horas Mateo obtuvo un peón de ventaja en la lucha por el centro del tablero, que luego fueron dos y hasta tres, que cedió en el último suspiro para efectuar un mate de bella factura con torre, rey y alfil.
Finalmente en la mesa 4 Jon Goñi demostró que con confianza pocos le pueden hacer frente. Fue a José Luis Sampedro al que le tocó lidiar con él. Su juego pétreo y karpoviano desarboló las intentonas de su adversario por obtener algo positivo. Las ventajas fueron pasando de movilidad a espacio, de espacio a material y de material a mate, con sacrificio incluido. Impecable.
Puede parecer poco un 2-2 después de conseguir los resultados que logramos en las jornadas anteriores, pero la realidad es la que es. Cualquier equipo te puede hacer un traje y este Martintxo B viene demostrando mucha solidez al haber empatado sus tres encuentros (6). Por ello, damos por bueno el resultado, que creo que fue justo para ambas escuadras según lo visto en los tableros. Tras este empate bajamos a la segunda plaza (7,5), manteniéndonos en posiciones de ascenso, pero sin dar la espalda a la realidad, que no advierte que el descenso está a tres puntos. Sestao lidera la tabla (8) y Oberena (1,5) la cierra. Billabona, tercer clasificado en estos instantes, nos espera el próximo sábado.
Podéis ver toda la información de la ronda 3 en este enlace.
